Más de 100 manantiales, entre naturales y artificiales, alimentan las aguas de los populares baños termales que pueden disfrutarse a día de hoy en Budapest. Son 118 exactamente y sus propiedades han sido reconocidas por los habitantes de la ciudad desde tiempos inmemoriales. Sin embargo, alcanzaron un relevante auge durante la ocupación turca en el siglo XVI al construirse una serie de instalaciones para el uso y disfrute de las mismas.

A lo dicho anteriormente, nos gustaría agregar que desde 1934 y hasta la actualidad, la ciudad de Budapest es conocida como Ciudad Balneario. Tal renombre le fue asignado debido a la gran cantidad de establecimientos dedicados a este fin y a la calidad de los mismos.

Sin duda alguna, si te encuentras de visita en la capital húngara, conocer al menos uno de sus balnearios es una parada prácticamente obligatoria. Disfrutar lo que los húngaros consideran una tradición es fundamental para acercarnos aún más a este maravilloso pueblo. Por ello te invitamos a continuar leyendo nuestro artículo, aquí te hablaremos de los baños termales más tradicionales.

 

Balneario Széchenyi

Nos gustaría comenzar nuestras recomendaciones con uno de los baños termales más reconocidos del país. En este caso nos referimos al Széchenyi, cuya popularidad está dada, sobre todo, por ser uno de los balnearios medicinales más grandes del continente europeo.

Su construcción, llevada a cabo durante la primera mitad del siglo XX, es considerada una de las más hermosas si de balnearios se trata. Con elementos de estilo clasicista y neorrenacentista, la decoración del lugar ha enamorado a todo el que visita sus instalaciones llegando a ser valorado como una especie de ¨palacio de baños¨. Alberga 15 piscinas entre las que podemos contar 3 exteriores, algunas solo de inmersión, etc.

Sus aguas suelen alcanzar temperaturas que varían entre los 18 ° C y 40 ° C, compuestas esencialmente por elementos como sodio, sulfato y bicarbonato de calcio-magnesio. Además, en Széchenyi los visitantes también pueden disfrutar de servicios de baños de vapor, saunas, tratamientos con barro medicinal, masajes terapéuticos, etc.

Si decides conocer este maravilloso sitio debes tener en cuenta que, aunque está abierto todos los días, solo podrás visitarlo de 7 a 19 horas. También te animamos a obtener tu billete de entrada con antelación. Lo puedes hacer a través de internet y de este modo evitar posibles colas o tener que replanificar tu visita porque no alcances entradas disponibles.

 

Balneario Gellért

Otro de los balnearios más populares de Budapest es el Gellért. Construido en 1918, las aguas que alimentan sus piscinas eran fuente de disfrute para los habitantes de la región desde el siglo XV. Durante el dominio otomano el lugar que hoy ocupan sus instalaciones alcanzó gran renombre convirtiéndose en las más grandes de la época utilizadas como baños termales.

Como dato interesante, nos gustaría destacar que en el siglo XVII fue nombrado Sárosfürdő que significa ¨Baño de Lodo¨. Esto se debió a que junto con el agua que brotaba del manantial también se depositaba al fondo de las piscinas una fina capa de limo. Luego de su apertura en 1918, las instalaciones de Gellért han sido ampliadas y con el paso de los años muchos de sus servicios se han renovado.

Como indicamos, a día de hoy es reconocido como uno de los mejores complejos de baños termales en Budapest. Cuenta con una majestuosa piscina principal rodeada de esculturas, columnas y mosaicos de marcado estilo Art Nouveau. También cuenta con otras piscinas de menor tamaño, de inmersión, locales para saunas y masajes y una popular alberca de olas artificiales.

La temperatura de estos baños suele oscilar entre los 35° C y 40 ° C y sus aguas se caracterizan por contener calcio, magnesio, hidrocarbonato, álcalis, cloruro, sulfato y fluoruro.

Como antes, te aconsejamos reservar tu entrada a través de internet. Al tratarse de un sitio tan popular, suele tener gran demanda casi a diario. Sus servicios están disponibles al público de lunes a domingos desde las 9 hasta las 19 horas.

 

Balneario Rudas

Construido durante el siglo XVI, el balneario Rudas aun es considerado uno de los baños turcos más impresionantes del planeta. Su maravillosa edificación responde al estilo de este tipo de construcciones desarrollada durante la ocupación otomana en la región. Aunque fue levantado en el siglo XVI, sus instalaciones se ampliaron en épocas posteriores.

Como resultado de estas modificaciones a la piscina principal se añadieron otras más pequeñas y servicios típicos de estos establecimientos tales como saunas.

Como explicábamos, Rudas cuenta con una piscina octogonal en su estancia principal y cuatro piscinas a los lados con niveles de temperatura diferentes. Asimismo, los visitantes tienen a su disposición una piscina al aire libre desde donde se obtienen fantásticas vistas del Danubio.

Un dato importante sobre Rudas es que los baños turcos tienen un horario específico para mujeres y otro para hombres, separando también los días en los que está permitido el uso para ambos sexos de manera simultánea. Por ello te animamos a que, si decides visitar sus históricas instalaciones, consultes con antelación los días en que pudieras hacerlo.

Es cierto que los baños termales aquí mencionados son los más frecuentados, sin embargo, hay que destacar que hablamos de los mejores de Budapest. Por tanto, insistir en una visita a alguno de ellos es una muy buena idea para disfrutar de una jornada de descanso. Hemos preparado una serie de consejos que pueden ayudarte a la hora de hacer tu reserva.

  • En primer lugar, consulta el horario de los servicios que desees disfrutar. Ten en cuenta que por ejemplo Rudas tiene establecido horarios específicos para hombres y para mujeres.
  • No olvides llevar bañador propio, toalla, chanclas, etc. Puedes encontrar que alguno de los balnearios te ofrezca la oportunidad de hacerte con estos elementos, pero es mejor que vayas preparado.
  • Si no te gustan las aglomeraciones, será mejor que hagas tu visita entre semana. Especialmente a primeras horas de la mañana es cuando menos turistas acuden a estos lugares.
  • No importa la época en la que decidas visitar Budapest, los baños termales están abiertos durante todo el año.